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WOLFF TRATA DE CONTENER EL FUEGO EN MERCEDES

El pasado Gran Premio de Emilia-Romaña en Imola no pasará a la historia como una de las carreras más emocionantes. La prueba siguió el guion que desafortunadamente tienen marcado estas carreras en la que la pista se va secando y se crea un único carril seco que imposibilita los adelantamientos.

En la parte alta de la clasificación los ritmos estaban muy diferenciados y no había lucha, lo que provocó que la realización se acabara fijando en el fondo de la parrilla donde un siete veces campeón del mundo se veía atrapado en un trenecito de rebufos en el que fue totalmente incapaz de adelantar al AlphaTauri de Pierre Gasly, que a su vez no podía con el Williams de Alex Albon.

Llovía sobre mojado en el caso de Lewis Hamilton, pues en clasificación, donde quedó eliminado en la Q2 y lejos de su compañero de equipo, ya se vivió un episodio tenso en el box del británico, con un acalorado intercambio de palabras entre Toto Wolff y él mismo. Ninguno de los dos quiso explicar lo ocurrido, afirmando que eran cosas internas y saliendo por la tangente a la hora de abordar el tema.

Hay quién ve a Hamilton como una bomba de relojería. Hace cinco carreras estaba luchando por llevarse el octavo título de campeón, el cual rozó hasta la última vuelta, y ahora se encuentra pilotando un vehículo que no puede luchar por victorias y donde Bahréin aparte, está siendo vapuleado por su compañero de equipo.

George Russell cuarto y Hamilton decimocuarto, ganando luego una posición por sanción. Nadie tenia claro por dónde podría salir Lewis Hamilton al término de la carrera, pero en el seno de Mercedes estaba el temor. Y ahí salió Toto Wolff, entonando el mea culpa y prometiéndole a Lewis Hamilton que volverán. Tras un discurso del jefe de equipo que sintió la necesidad de hacerlo públicamente en una radio que sabe que está siendo pinchada en lugar de esperar a que el piloto se bajara del vehículo, Hamilton no pudo más que coger el relevo de sus palabras.

Astuto el austriaco apagando un fuego que aún no se había empezado a formar, poniendo la venda antes de que se produjera la herida. Pero eso no hace más que evidenciar que en Mercedes son conocedores de que hay una bomba a punto de explotar.

Fuente: Carandriver

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